martes, 21 de julio de 2009

Healthy Food


Una de las cosas que uno descubre en el minuto uno de poner el pie en Estados Unidos es la especial relación que tienen con la comida. Desde los puestos de pretzels y donuts del aeropuerto al aluvión de pizzerias y hamburgueserias, pasando por los restaurentes italianos y chinos (qué decir de los carritos de perritos calientes de Nueva York, pecaminosos totales...), todo incita a comer. Bueno, no solamente a comer, sino a comer un tipo de comida denominada "fast" porque tan rápido como se come tan rápido se instala en tus caderas.

Así que este año y conociendo el percal he decidido prescindir la mayor parte de veces posible (en algunas ocasiones es casi inevitable) de ese tipo de comida e inclinarme hacia la healthy food. Gracias a la recomendación de Carmen de visitar el stop and shop (con una zona de fruta y verdura fresca maravillosa)y al hecho de comer o cenar en casa la mayoría de las veces creo que puedo tener este tema controlado o, al menos vigilado de cerca.

La buena noticia es que desde la primera vez que viene a ahora, ha habido un cambio en la oferta de los super y la fruta y la verdura y, en general, la comida saludable, se ha hecho un hueco en el mercado.

Ayer Delia y yo quedamos para cenar, y fuimos a una especie de mercado de comida fresca en el que había una barra de ensaladas maravillosa (y de todo tipo de comida que ni quisimos mirar...). Lo curioso es que ibas con el plato y la misma cajera que te cobraba las coca colas, pesaba el plato y te lo cobraba. Fuera de esta zona había otra en la que uno podía comer lo que había comprado. Eso sí, viendo, mientras degustas orgullosa tus espinacas, que el tipo de al lado se está pimplando una cuatro quesos cuyo aroma te puede matar en cualquier instante...

En fin, todo sea por los nuevos modelos de otoño...

1 comentario:

  1. Como la comida española..... cuando vengas te llevaremos a degustar un espeto de sardinas made in Málaga pa ponerles un piso!!!

    Muchos bezitos

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